dilluns, 23 d’octubre del 2017

Reedició dels Evangelis (3)

Continuo la sèrie que encetava amb l'entrada "Reedició dels Evangelis (1)" de data 23 de juliol. En aquella explico les motivacions que m'han portat a escriure aquesta nova versió d'alguns passatges dels evangelis, que no és més que apropar aquesta bona notícia a les persones LGTIB de bona voluntat. Pots seguir la resta de la sèrie des de l'etiqueta Drets Cristians o Drets LGTIB de la columna de la dreta.

Avui toca sobre la predicació de Jesús.
A lo Jesucristo Superstar, este profeta del siglo XXI no da sermones sino conciertos.
(Fotografia y texto de Bayona, Circus Christie)
 
Versió canònica 
|
|
Versió revisada  

Jesús volvió a Galilea lleno del poder del Espíritu Santo, y su fama se extendía por toda la tierra de alrededor. Enseñaba en la sinagoga de cada lugar, y todos le alababan.

(Lc 4, 14-15)






Jesús fue a Nazaret, al pueblo donde se había criado. Un sábado entró en la sinagoga, como era su costumbre, y se puso en pie para leer las Escrituras. Le dieron a leer el libro del profeta Isaías, y al abrirlo encontró el lugar donde estaba escrito: “El Espíritu del Señor está sobre mí, porque me ha consagrado para llevar la buena noticia a los pobres; me ha enviado a anunciar libertad a los presos y a dar vista a los ciegos; a poner en libertad a los oprimidos; a anunciar el año favorable del Señor.”
Luego Jesús cerró el libro, lo dio al ayudante de la sinagoga y se sentó. Todos los presentes le miraban atentamente.

(Lc 4, 16-20)
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|

Jesús con su grupo “Circus”, hacía bolos en bares y pequeños locales de las poblaciones cercanas a la gran ciudad. La fama de sus conciertos corría como lo pólvora.

En uno de los espectáculos Jesús y el grupo llegaron a la ciudad donde algunos habían crecido. Estaba nervioso porque sabía que sería el público más difícil, por aquello que “nadie es bien recibido en su tierra”.
En el mini concierto en aquel bar “Astrolabi” fue desgranando, a partir de la letra y el ritmo de las canciones, el mensaje de amor, de preocupación por el otro, de alejamiento de la individualidad. La verdad del Señor Amor. 
La gente escuchaba, cantando y bailando al son de la música. Al acabar el último bis, Jesús se sentó en el extremo de la tarima. Entonces se fue acallando la sala, después algunos murmullos, acabando por hacerse el silencio. Los miembros del grupo no acababan de comprender…

Com et sents davant aquesta reedició?
Com creus que acollirien millor el Missatge els joves?

Cap comentari:

Publica un comentari a l'entrada

Pots deixar el teu comentari si així ho desitges. Gràcies!
Tingues en compte que en cas de ser ofensiu, serà eliminat.